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La avalancha de noticias falsas durante los dos últimos ciclos de elecciones presidenciales en Estados Unidos es una historia reciente de la que debemos aprender. Especialmente ahora que nos encontramos en una nueva temporada de elecciones, hay agitación política global y un panorama de titulares cargados de emociones. Al aprender a detectar información falsa, es fundamental entender las principales categorías de noticias falsas: desinformación y malinformación.
De hecho, la difusión de información engañosa y noticias falsas en línea tiene consecuencias reales. Antes de la aparición de las redes sociales, los rumores a través del boca a boca se propagaban rápidamente, pero estaban limitados al número de personas que los compartían. Una escuela, barrio o pequeña ciudad podía verse envuelta en ese rumor. Sin embargo, hoy en día, una noticia falsa en línea tiene el potencial de alcanzar a muchísima más gente en pocas horas.
Evitar el engaño o la desinformación es posible. Ya sea que prefiera navegar por internet o las redes sociales, es importante adquirir habilidades para detectar información engañosa, inexacta o falsa. El primer paso es entender las diferencias entre la malinformación y la desinformación.
La Asociación Americana de Psicología define la malinformación como información falsa o inexacta. En otras palabras, es información que contiene errores porque algunos hechos son incorrectos. Este tipo de noticias se conoce como malinformación no intencional. Aunque la información es incorrecta, se difundió sin intención de dañar.
A pesar de su similitud con la malinformación, la desinformación tiene consecuencias más serias. Entonces, ¿Qué es la desinformación? Se define como la propagación de información falsa con el propósito de engañar a los lectores. Compartir información errónea a sabiendas y engañar o mentir intencionadamente al público es un acto de desinformación. Este tipo de noticias, en general, tiene un origen malintencionado. La desinformación a veces se difunde con la intención de crear discordia entre ciertos grupos, apuntando a personas que no saben identificar las características de la desinformación.
Es esencial entender esta distinción. Hay una línea clara entre compartir algo que creía que era cierto sin intentar causar revuelo y difundir noticias falsas con el fin de generar caos.
Es sumamente complejo combatir la proliferación de información engañosa o falsa en línea. Las estafas online y la vulnerabilidad en las redes sociales son solo la punta del iceberg.
Es crucial reconocer y enfrentar la información engañosa y falsa. No solo para prevenir que otras personas sean víctimas de ella, sino también porque, en algunos casos, ha derivado en situaciones trágicas o violentas. La difusión de malinformación ha crecido a medida que el internet continúa siendo la principal fuente de noticias internacionales, nacionales y locales. También es difícil ignorar las noticias falsas cuando las personas se encuentran constantemente bombardeadas con ellas.
Para profundizar en los impactos sociales, considere los siguientes eventos históricos. Todos sucedieron en la última década y fueron el resultado de la difusión de noticias falsas en línea.
Evite ser víctima de la malinformación. El consejo más importante para detectar noticias cuestionables es mantener un escepticismo sano. Ya sea que las noticias provengan de una plataforma en línea o de un medio de comunicación reconocido, siempre es recomendable abordar la información con cierto escepticismo.
Realice su propia investigación. Verifique la fuente, incluso si es su medio de noticias de confianza. Si la información proviene de un amigo de confianza, pregunte, ¿De dónde obtuvo esa información? Es válido confiar en expertos en su área, pero cuando lo que comparten va más allá de su especialidad, no es mala idea buscar más información respaldada por hechos antes de difundir posiblemente malinformación.
Los medios que combinan verdades a medias, hechos parciales y racionalidad con información engañosa, alcanzan a grandes audiencias, especialmente cuando se presentan en forma de entretenimiento. Un método más técnico podría ser revisar la dirección web. ¿Tiene HTTPS en ella? La “S” indica que el sitio web es seguro. Es recomendable revisar la dirección web en busca de esa letra antes de introducir información personal.
Profesionales capacitados para detectar noticias falsas comparten métodos simples que permiten a los lectores hacer lo mismo. Por ejemplo, psicólogos continúan luchando contra la difusión de desinformación relacionada con el COVID. Los educadores se enfocan en enseñar la alfabetización mediática para detener la difusión y prevenir la propagación de noticias falsas.
La seguridad en las redes sociales es un tema desafiante. El estado de la comunicación pública siempre está en flujo constante. Especialmente cuando las generaciones más jóvenes se alejan de los programas de noticias nocturnas tradicionales. Y en su lugar, la información provenga de diversas plataformas de redes sociales. Un análisis más detallado de las redes sociales encontró que el "miedo a la exclusión" hacía más probable que la gente comparta noticias falsas en línea.
TikTok, por ejemplo, no es solo para entretenimiento. Cada usuario tiene la oportunidad de ser visto y hacerse oír. Independientemente de lo que los usuarios digan, hagan o promuevan, cuanto más atención obtengan, más influencia tendrán. Ya sea que deslices los posts o reacciones a ellos, recordá considerar al influencer de redes sociales cómo, y de donde, obtuvo su información. Hacer preguntas después de leer, escuchar o ver noticieros es parte clave para mejorar las habilidades de comprensión.
Si estás preocupado por la posibilidad de que tu familia o amigos difundan desinformación, acercate a ellos con preguntas como: En caso de necesitar consulta médica ¿Escucharían a un influencer de las redes sociales o consultarían a un médico? Si quisieran aprender sobre el cambio climático, ¿Escucharían a un TikToker o preguntarían a un meteorólogo? Recordá, las afirmaciones virales y los rumores en línea se propagan rápidamente. Es un buen hábito desarrollar una mente inquisitiva y cuestionar la autenticidad de la afirmación o rumor.
La propagación de información falsa y noticias falsas sería menos problemática si se quedara donde está, en línea. Lo que llama la atención de los medios es que la gente creía en estas noticias fabricadas y reaccionaba a ellas. La violencia armada en Estados Unidos, por ejemplo, continúa siendo un titular nacional debido a los constantes tiroteos masivos. Los datos muestran que ha sucedido aproximadamente un tiroteo masivo por día desde que comenzó el nuevo año. Los esfuerzos para desacreditar los mitos difundidos por el lobby de las armas continúan.
Saber cómo detectar datos falsos en línea y en las redes sociales hará más fácil evitar estafas y detener la difusión de mentiras. Preguntate, ¿Suena absurdo el titular? Las redes sociales han allanado el camino para que la comedia y el comentario social se superpongan. Si la "noticia" o actualización suena rara, comprobá si es una broma sarcástica.
Las preguntas que debes hacerte al navegar por artículos de noticias y videos en línea son:
Con la llegada de las redes sociales, como Twitter, TikTok, Facebook, Instagram y Twitch, no es de extrañar que cualquier información publicada se propague rápidamente. Los estudios muestran que las noticias falsas se comparten más a menudo en Twitter y se propagan más rápido que las historias reales.
Las noticias falsas o la desinformación fomentan una comunidad polarizada donde algunas personas basan sus opiniones y creencias en información falsa. La difusión de noticias falsas ha profundizado la desconfianza pública en los medios. Investigaciones están demostrando la conexión entre la desinformación y el racismo en casos criminales.
Las campañas de desinformación han llevado a desacreditar a expertos, como médicos y científicos que informaban a la población sobre los efectos en la salud del COVID-19. El locutor de podcasts Joe Rogan está enfrentando controversias por sus noticias falsas sobre el COVID. Esto ha indignado a algunos médicos. La difusión de la desinformación se destacó como un factor clave en los disturbios del Capitolio del 6 de enero de 2021. Las repercusiones incluyen a más de mil personas acusadas.
Tomar medidas preventivas es la mejor manera de combatir la desinformación y las noticias falsas. Eso significa aprender a detectar información poco confiable utilizando métodos efectivos de evaluación de fuentes. Si te preocupa la posibilidad de deepfakes, podemos ayudarte a aprender qué es un deepfake y cómo detectarlo. Adquirir una mejor comprensión de la desinformación y cómo evitarla es esencial.
Ya seas un entusiasta de la ciberseguridad o estés interesado en la IA y ChatGPT, aprender a separar los hechos de la ficción hará que interactuar con un futuro tecnológicamente avanzado sea un proceso sin estrés.
