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Con tantas actividades que hacemos hoy en día en Internet, un acceso lento o intermitente puede provocar una pérdida de productividad e incluso de ingresos. Sin embargo, es posible detectar y solucionar los problemas de WiFi que se presentan frecuentemente.
Si tenés problemas o no sabés cómo activar wifi en la notebook, podés aprovechar las recomendaciones que hemos preparado para vos.
Hay varios motivos comunes por los que una notebook podría perder el acceso. Algunos incluyen fallas con la señal WiFi, configuración incorrecta de la conexión, fallas en el router o el módem, problemas con el software, entre otros.
En algunos casos, la pérdida de conexión puede ser temporal y resolverse por sí sola, mientras que en otros casos requieren una solución más técnica. Vamos a enfocarnos en las fallas frecuentes que podés corregir con facilidad en Windows 10:
Solución: verificá y activá el modo de conexión WiFi.
Tal vez te parezca algo elemental, pero comprobar que la conexión inalámbrica no se haya apagado accidentalmente es el primer paso que debe tomar para solucionar el problema.
1.1 Hacé clic en el emblema de conexión inalámbrica que podés ubicar en la parte inferior derecha de tu pantalla.
1.2 Verificá que esté sombreado (color azul por defecto) el botón “WiFi”, de lo contrario hacé clic para activar y conectar a tu red. Asegúrate que el modo avión esté inhabilitado.
Si el modelo de tu notebook dispone de botón físico, entonces revisá que esté activado para conectarte a la red WiFi. De igual forma verificá que esté inactivo el modo avión.
Solución: revisá el cableado de conexión entre el router y el modem.
Una falla en este cable podría dejarte sin conexión a Internet, los datos no serían transferidos correctamente entre equipos, esto podría resultar en una conexión intermitente o incluso una interrupción.
Es factible que este problema se deba a la rotura del cable, un conector o incluso a una interferencia electromagnética. Para solucionar el problema, es necesario identificar y corregir la causa subyacente de la falla. Esto puede requerir reemplazar el cable o simplemente ajustar la conexión en un extremo u otro. Si bien existen probadores de cables Ethernet, el costo de estos hará que sea más accesible y sencillo reemplazar el cable.
2.1 Comprobá que el cable Ethernet esté conectado correctamente en ambos dispositivos y que no haya ningún daño visible en los conectores o el cable.
2.2 Reemplazá el cable para descartar la falla del cable que está en uso.
2.3 Verificá que la luz de “conexión Internet” esté encendida en ambos dispositivos.
Solución: verificá si el controlador del adaptador de red está actualizado.
Los controladores obsoletos o corruptos también suelen causar inconvenientes. Para que el adaptador inalámbrico ande correctamente debe estar actualizado con la versión más reciente. Se trata de una posible solución cuando la conexión es lenta o se interrumpe continuamente.
3.1 Abrí “Administrador de dispositivos” utilizando la barra de búsqueda
3.2 Desplegá “Adaptadores de red” y hacé clic derecho en el adaptador de red inalámbrico, luego seleccioná "Actualizar controlador".
3.4 Elegí la opción "Buscar controladores automáticamente". El sistema realizará el proceso de búsqueda e instalación.
3.4 Reiniciá tu notebook para que el sistema cargue la actualización.
Solución: reinstalá el controlador del adaptador.
La reinstalación del controlador de red limpiará el registro y restablecerá todas las configuraciones existentes, lo que podría ayudar a tu notebook a acceder a Internet de vuelta. Conocé los pasos para realizar el procedimiento:
4.1 Ingresá al “Administrador de dispositivos” y hace doble clic en “Adaptadores de red”
4.2 Elegí el adaptador de red WiFi y después de hacer clic derecho seleccioná “Desinstalar dispositivo”.
4.3 Confirmá la desinstalación para iniciar el proceso, asegurate de que el adaptador inalámbrico ya no aparezca en la lista.
4.4 Hacé clic en la pestaña “Acción” en la parte superior y elegí “Buscar cambios de hardware” en el desplegable. El sistema reinstalará el adaptador WiFi y podrás ver su nombre una vez más en la lista.
4.5. Cerrá todas las ventanas y reinicia tu notebook.
4.6 Intentá ingresar a Internet de vuelta.
Solución: utilizá el solucionador de problemas para buscar y corregir la falla.
Se trata de una herramienta de diagnóstico que ayuda a resolver problemas comunes de acceso a la web, escanea el sistema para detectar problemas y luego ofrece soluciones adecuadas.
5.1 Ingresá a la sección de configuración, presioná la tecla del logotipo Windows + I simultáneamente.
5.2 Abrí la opción “Internet y red”, después seleccioná “Estado” en el panel izquierdo.
5.3 Hacé clic en “Solucionador de problemas de red” en la sección inferior.
5.4 Seguí los pasos establecidos para corregir la falla de acceso.
Es importante tener en cuenta que esta herramienta no es una solución definitiva para todos los inconvenientes de conectividad, pero podría ayudar a resolver algunas fallas comunes.
Solución: reiniciá el enrutador y el modem.
Reiniciar estos dispositivos en ocasiones puede ser una opción válida. Los componentes de hardware y software (de un enrutador o módem) son propensos a causar fallas de vez en cuando debido a una variedad de razones. Tal como tu notebook debe reiniciarse ocasionalmente para actualizar los procesos en ejecución y borrar el caché.
6.1 Desconectá los cables de alimentación.
6.2 Esperá por un tiempo mínimo de 10 segundos y conectá de vuelta.
6.3 Una vez que tu enrutador y modem estén encendidos, esperá unos dos minutos antes de conectar la notebook a la red.
6.4 Verificá si tenés acceso a Internet en tu computadora.
Solución: revisá y actualizá la configuración del adaptador.
La configuración de potencia de transmisión en un adaptador WiFi permite optimizar la calidad de la señal y la eficiencia del dispositivo. Un ajuste adecuado te ayudaría a evitar fallas de conectividad en la notebook.
Si la configuración está ajustada con un nivel bajo podría reducir la cobertura de la tarjeta de red, sobre todo cuando hay obstáculos y una distancia considerable entre el router y tu notebook. En caso contrario, configurar la potencia máxima te permitirá compensar esta situación y evitar problemas de conectividad.
7.1 Abrí el programa “Administrador de dispositivos” desde la barra de búsqueda
7.2 Desplegá los “Adaptadores de red” y hacé clic derecho en el adaptador WiFi, inmediatamente elegí "Propiedades".
7.3 Ingresá en “Opciones avanzadas” y hacé clic en “Potencia de transmisión”
7.4 Seleccioná el valor de potencia máximo en las opciones que se despliegan del lado derecho.
Mejorar la señal WiFi es importante para tener una conexión más fuerte y estable tanto en el hogar como en la oficina. Tenés la posibilidad de lograrlo mediante varias alternativas, bien sea con la ubicación del router, instalación de repetidores de señal, cambiando la frecuencia del canal o inclusive la actualización del firmware.
Ni bien optimices la señal WiFi podés disfrutar de una experiencia de navegación más fluida y sin interrupciones, lo que resulta en una mayor productividad.
Se trata de un equipo amplificador de señal WiFi que se emplea para extender el alcance. Vamos a desglosar las 3 etapas de funcionamiento para una mejor compresión:
Recepción de la señal: el repetidor de señal WiFi obtiene la señal inalámbrica débil de la red existente y la amplifica
Procesamiento: el extensor de señal WiFi reduce el ruido y mejora la calidad de acceso
Transmisión de la señal amplificada: finalmente, el repetidor transmite la señal amplificada a los espacios con deficiencia de conectividad.
Un repetidor WiFi es útil para solucionar problemas de cobertura de señal y mejorar la calidad de la conexión inalámbrica, sobre todo en áreas donde la señal original es débil o no llega. Sin embargo, tomá en cuenta que a medida que la señal se amplifica, también disminuye su velocidad y puede degradarse la conexión.
Es importante tener en cuenta los siguientes factores para instalar el router en un lugar adecuado:
Distancia: debe estar próximo a los equipos que se conectarán a la red para asegurar un nivel de señal adecuado.
Altura: instalá el router lo suficientemente alto para que la señal WiFi pueda propagarse sin obstáculos. Se recomienda una distancia media entre el techo y el suelo, además de posicionar la antena WiFi con una posición adecuada para un mejor alcance (45° si tiene 1 antena, en caso que tenga 2, posicionar una en vertical y otra en horizontal).
Interferencias: es muy importante que esté alejado de objetos que puedan obstaculizar la señal WiFi, como paredes gruesas, metales y dispositivos como los microondas.
Ventilación: es vital mantener la temperatura de operación adecuada para que el router ande correctamente. Por lo tanto, tenés que disponer de suficiente espacio para lograr una buena ventilación.
El enrutador WiFi de doble banda te brinda la posibilidad de mejorar el rendimiento de tu red. Con esta innovación podés aprovechar los siguientes beneficios:
Mayor eficiencia: podés transferir gran cantidad de información a velocidad superior.
Baja congestión: Con esta alternativa evitás la congestión porque utilizás la de 5 GHz para aplicaciones que demanden más velocidad y ancho de banda.
Mejor cobertura: la banda de 2.4 GHz tiene un alcance más amplio, podés mejorar la distribución de señal en cada banda y optimizar la red.
Versatilidad: algunos equipos más antiguos solo son compatibles con una banda, por lo que es útil disponer de un enrutador que facilite la conexión.