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Uno de los mayores problemas que experimentan los jugadores al jugar el último juego triple-A (AAA) es el screen tearing. Es un fallo visual que ocurre cuando los fotogramas que se muestran durante el juego parecen dividirse a la mitad y no coinciden.
En algunos casos graves de screen tearing, el cuadro puede dividirse aún más. Esto hace imposible el que te puedas concentrar en tu próxima misión, ya que no puedes ver correctamente, por lo que esto representa un problema grave para los jugadores, desde aficionados hasta profesionales.
Los monitores estándar generalmente tienen una frecuencia de actualización de 60 Hz, lo que significa que se pueden mostrar 60 cuadros por segundo. [1]
Una PC para juegos muy rápida, por otro lado, puede tener una frecuencia de actualización aún más rápida. Si los cuadros comienzan a aparecer más rápido de lo que el monitor puede actualizar, tu pantalla mostrará imágenes que contengan más de un cuadro.
Otro problema común es el "stuttering", donde las imágenes parecen tartamudear debido a una configuración de múltiples GPU, gracias a que los fotogramas entran de manera desigual en una línea de tiempo. Entonces, ¿cómo resuelves estos problemas? Una forma es utilizar AMD FreeSync®, que ayuda a resolver una experiencia visual inconsistente.
La respuesta corta es: la tecnología AMD FreeSync ofrece a los gamers frecuencias de actualización dinámicas y adaptables. [2]
Está bien, pero esto plantea la siguiente pregunta ¿qué son las frecuencias de actualización dinámicas?
Un monitor con esta tecnología habilitada sincroniza su frecuencia de actualización con la frecuencia de cuadros de la GPU de un usuario, para reducir la latencia de entrada y disminuir el screen tearing durante las sesiones de juego y la transmisión de video. En términos sencillos: el monitor se actualiza dinámicamente según el rendimiento de tu tarjeta gráfica.
Cuando se usa FreeSync, el monitor se actualizará junto con el juego que estás jugando, hasta su frecuencia de actualización más alta posible (75 Hz).
Por ejemplo:
Generalmente, AMD FreeSync funciona dentro de una ventana de 48 a 75 Hz [ 3]. Por lo tanto, si estás jugando un juego con 100 a 200 FPS (fotogramas por segundo), no verás los beneficios de AMD FreeSync porque no te encuentras dentro del punto óptimo o dentro del rango para un juego fluido.
Cuando empiezas a buscar tecnologías de sincronización adaptativa, el otro jugador importante es NVIDIA® G-Sync™.
NVIDIA fue en realidad la primera en comercializar su propia tecnología de frecuencia de actualización dinámica cuando se asociaron con Asus®, Acer® y AOC® para su lanzamiento. Para que un monitor sea compatible con G-Sync, debe tener hardware específico de G-Sync que tiende a ser costoso y aumenta el precio general del sistema.
Las pantallas G-Sync necesitan un módulo escalador NVIDIA G-Sync para que funcione. Para usar FreeSync, los fabricantes de monitores pueden usar un módulo escalador de cualquier fabricante de hardware que sea compatible con AMD FreeSync. [4]
Como señala PCWorld, hay algunos inconvenientes de FreeSync que debes tener en cuenta al comprar monitores. Aunque, en general, es una gran opción en lo que respecta a la tecnología de sincronización adaptativa, el principal inconveniente es que el rango de limitación de FreeSync —de 48 a 75 Hz —significa que solo hay ciertos monitores que se ajustan a esos parámetros específicos.
Puede ser difícil entender esto. Sin embargo, si visitas el sitio web de AMD, puedes encontrar una útil tabla de monitores que son compatibles.
AMD creó recientemente una función llamada Compensación del bajo ritmo de fotogramas (LFC por sus siglas en inglés) y la agregó a su tecnología FreeSync. ¿Qué hace LFC exactamente?
Ayuda a fortalecer el rendimiento de los monitores FreeSync cuando están por debajo de su frecuencia de actualización mínima (por ejemplo, 48 FPS). Los monitores habilitados con LFC duplicarán los fotogramas si las tasas están fuera del rango de FreeSync. [5]
¿Qué significa esto en una situación de juego real? Si tu GPU está impulsando 30 FPS, LFC puede duplicar cuadros y ejecuta la pantalla a 60 Hz para que puedas disfrutar de imágenes más fluidas [6]. Es una gran característica para los jugadores que buscan maximizar su experiencia de juego en una PC.
Si buscas una experiencia de juego fluida, AMD FreeSync puede ser la solución. Hay pocas cosas más irritantes que el stuttering constante y el screen tearing cuando la GPU y la tasa de refresco no están del todo sincronizadas.
Con la tecnología AMD FreeSync, puedes sumergirte completamente en tu juego sin ningún fallo visual que te distraiga de tus objetivos principales.
Dile adiós a las experiencias de gaming deficientes y entra en una experiencia visual tan buena que podrás olvidarte del mundo real por completo.
(Referencias en inglés)
[1] Reseñas de confianza; Supervisa las tasas de refresco: por qué más no siempre es mejor
[2] AMD; Tecnología Radeon FreeSync
[3] AnandTech; ¿Cuál es la forma correcta de utilizar FreeSync?
[4] CRT; ¿Cómo funciona AMD FreeSync?
[5] AMD; Compensación de velocidad de fotogramas baja
[6] PCWorld; G-Sync frente a FreeSync: juegos de sincronización adaptativa