Cómo desbloquear un disco duro

Ver cómo aparece una pantalla azul con un mensaje de Windows de que tu disco duro está bloqueado puede ser inquietante. ¿Qué pasará con tu información? ¿Podrá arreglarse fácilmente?

Antes de que entres en pánico, sigue estos pasos rápidos para saber qué hacer:

• ¿Qué significa?
• ¿Es un problema de Hardware?
• ¿Qué hago ahora?
• Cómo evitar un bloqueo de disco duro

Antes de comenzar, te ayudará saber lo que significan esos mensajes de error por disco duro bloqueado. Si bien no son frecuentes, pueden llegar a ser una verdadera molestia.

También llamado “el pantallazo azul”, este fenómeno puede ocurrir en cualquier momento durante una sesión de Windows y te pedirá que desbloquees el disco y vuelvas a intentarlo cuando inicies sesión. Existen varias causas posibles, entre ellas, daño por malware o falla de hardware.

Sin embargo, no todo está perdido si actúas con rapidez.

Para seguir los pasos siguientes, necesitarás medios de instalación de Windows que hayan sido creados con anterioridad en un disco compacto o una memoria USB. Si no tienes un disco de instalación, puedes visitar el sitio de Windows correspondiente a la versión de tu sistema operativo para obtener ayuda.

Instala el disco de instalación o la memoria USB y enciende el equipo.

En la mayoría de los casos, aparecerá un mensaje emergente en la parte inferior de la pantalla, el cual te indicará que presiones F12 o F8 para acceder al menú de inicio. Sigue las instrucciones y espera a que cargue.

1. Elige “Reparar el equipo”
2. Luego ve a “Opciones avanzadas de inicio”
3. Después, “Solucionar problemas”
4. Enseguida, elige “Opciones avanzadas”
5. Y por último, “Símbolo del sistema”
6. Aparecerá una pantalla negra emergente (la ventana del símbolo del sistema) 
7. Escribe “chkdsk D: /f /x /r” y presiona “Enter”

La operación se ejecutará durante unos segundos. Cuando termine, solo escribe “exit” y pulsa “Enter”. Ahora puedes reiniciar el equipo.

Si te sigue apareciendo el mensaje de disco duro bloqueado, tendrás que seguir el segundo paso.

Arranca el equipo desde el disco o la USB como lo hiciste en el paso anterior. Vuelve a realizar la operación en la ventana de MS-DOS.

1. En la ventana del símbolo del sistema, escribe “sfc /scannow” y espera a que se ejecute el proceso. 
2. Escribe “exit” y “Enter” para salir de la aplicación.

Reinicia el computador. Si sigue bloqueado, intenta con el tercer paso.

Podría ser que tus archivos de inicio estén dañados, así que puedes usar estos pasos para arreglarlos.

Arranca desde tu disco o USB como en el paso anterior y luego escribe las siguientes instrucciones en la ventana del símbolo del sistema para iniciar la secuencia de reparación:

1. Escribe “bootrec /RebuildBcd” y pulsa “Enter”. Espera a que se realice el proceso. 
2. Escribe “bootrec /fixMbr” y pulsa “Enter”. De nuevo, espera a que termine de ejecutar el proceso. 
3. Escribe “bootrec /fixboot” y pulsa “Enter”. Una vez que se ejecute, escribe “exit” y presiona “Enter” para salir de la aplicación. Reinicia el equipo.

Si sigues teniendo problemas, continúa con el paso siguiente.

Si el disco duro fue bloqueado recientemente (en las últimas semanas), restaurar el sistema podría ayudarte a resolver el problema.

Restaurar el sistema es diferente que restablecerlo porque conserva todos los archivos que no pertenecen a Windows, así como controladores y programas, pero volverá a un conveniente estado anterior desde el que podrás elegir los productos y servicios de Windows.

Para llevar a cabo esta solución:

1. Arranca desde el disco o la memoria USB.
2. Selecciona “Reparar el equipo”.
3. Selecciona la opción de “Restaurar” y elige la fecha más temprana que viene en la lista o la última vez que recuerdes que tu computador funcionaba adecuadamente.
4. Deja que el asistente ejecute la operación.
5. Reinicia el equipo y comprueba que lo haga de manera normal.

Si no es así, tendrás que seguir con el quinto paso.

Este proceso puede ser tu última oportunidad antes de pedir ayuda a terceros. Restablecer el computador no debería causar daños a tus archivos o eliminarlos.

Luego de arrancar desde tu disco  o memoria USB:

1. Haz clic en “Reparar el equipo”
2. Ve a “Solucionar problemas”
3. Elige la opción “Restablecer este PC”

El asistente te guiará a través de los pasos necesarios para completar el proceso.

Puede tomar algunos minutos. Cuando termine, te pedirá que reinicies el equipo para comprobar que funcionó. Si así fue, te darás cuenta de que la configuración cambió ligeramente y ciertos programas fueron eliminados.

Para seguir usando el computador después de haberlo restablecido, tal vez tengas que reconfigurar algunas opciones de usuario y preferencias de firewall, así como reinstalar algunos programas externos.

Al restablecer el sistema, Windows hará una lista de los programas que eliminó como referencia para ti. Tendrás que buscar los sitios o las tiendas correspondientes para descargar o instalarlos de nuevo.

Asimismo, es posible que se hayan eliminado algunos controladores (como los drivers de impresoras, accesorios o routers). El computador te pedirá que instales actualizaciones de Windows, pues tras restablecerlo, pueden desaparecer.

Si ninguno de los pasos anteriores funcionó, puede que tengas un problema de hardware. Por desgracia, un hardware con daño severo no tiene solución, así que tendrás que transferir tu información a un nuevo hardware, como una unidad de estado sólido (SSD).

La mayoría de los informáticos profesionales saben cómo extraer la información de tu computador si la situación lo requiere, pero se recomienda que tengas un respaldo, ya sea en otro dispositivo de almacenamiento como un disco duro externo, o bien en la nube.

Una vez que hayas logrado desbloquear tu disco duro, tendrás que actuar enseguida para restaurar y respaldar tus archivos.

Un bloqueo de disco duro puede deberse a un error de software o formateo, pero si el tuyo tiene daños físicos, lo cual es una causa frecuente de los “pantallazos”, es posible que le quede muy poco tiempo antes de averiarse por completo.

Deberías hacer una copia de tus archivos sin demora y, si tu disco duro es muy viejo, tal vez te convenga reemplazarlo también.

Para aquellos usuarios que tienen dos discos duros, existe una solución más sencilla: tan solo ejecuta el segundo disco que no está dañado en modo de administrador e importa los archivos del primer disco.

También debes tomar la iniciativa para asegurarte de que estás protegido contra errores futuros del disco duro, al darle mantenimiento constante a tu equipo. 

Reiniciar tu equipo en “Modo seguro” te permite realizar algunas de esas tareas de mantenimiento. Es el momento ideal para asegurarte de que tu protección antivirus y antimalware está actualizada, así como para hacer un escaneo meticuloso de tus discos y archivos.

Por desgracia, los pantallazos azules tienen muchas causas. A veces, se trata de un problema de desgaste en el disco duro.

El consumidor de discos duros promedio suele tener una garantía que va de los dos a los cinco años, así que no esperes que duren más que eso. Y si tu área de trabajo es muy cálida o polvorienta, su vida útil puede acortarse todavía más.

De nuevo, es recomendable que le des mantenimiento. La rutina promedio debe incluir:

Desfragmentación de disco 

Limpieza de archivos temporales y duplicados

Actualización de antivirus y firewall, así como escaneos frecuentes para detectar malware y otros softwares maliciosos

Activar permisos para que Windows instale actualizaciones, si así se requiere

Uso de redes seguras

Limpieza de polvo y conservación del equipo en un ambiente fresco 

Pronta respuesta a las advertencias (no esperar hasta que aparezca la pantalla azul)

En otras palabras, si tu computador es más viejo y muestra signos de avería, se congela con frecuencia o aparecen mensajes de error, no esperes hasta que se bloquee el disco duro para hacer algo al respecto. Empieza ya a respaldar tu información y adopta las medidas necesarias para asegurar que tus valiosos archivos estén a salvo cuando suceda lo inevitable.

Los discos duros no son eternos. Tal vez estos consejos ayuden a que tu equipo siga funcionando durante un considerable periodo de tiempo, pero no sustituyen a los cuidados que necesitas para mantener tu información segura en otro lado.

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