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Antes de que tu nuevo disco duro pueda funcionar correctamente, deberás particionarlo. Tu computador usa el disco duro de distintas maneras y para que tu sistema operativo funcione de manera apropiada, una parte de este debe estar seccionada.
Muchas veces, esto puede significar que tu sistema operativo usará todo el disco duro, aunque eso puede depender para qué estés usándolo.
Afortunadamente, Windows® hace que sea bastante sencillo particionar tu nuevo disco duro, y puede llevarte solo unos minutos.
Puedes hacer esto en la mayoría de los sistemas operativos Windows, incluidos XP, Vista y Windows 7 en adelante.
Dividir el disco puede ser benéfico para este y para tu sistema operativo de varias formas.
Si tienes archivos grandes a los que necesitas hacerle una copia de seguridad de forma regular, o si necesitas dividir estos archivos para que quepan en tu computador, entonces la partición puede ser de gran ayuda.
Además, tu computador necesita espacio disponible para cargar archivos y programas correctamente. Si te estás quedando sin espacio y no deseas actualizar tu sistema, seccionar el disco puede ser tu mejor opción.
Hay dos tipos principales de dispositivos de almacenamiento que se pueden particionar y es poco probable que utilices otro para tu sistema.
Se pueden usar discos duros magnéticos y unidades de estado sólido, y no son difíciles de instalar en tu sistema operativo Windows.
Windows hace que sea bastante fácil fraccionar un disco duro por tu cuenta. Sin embargo, si planeas instalar un sistema operativo Windows en tu nueva unidad, no necesitarás particionarlo ni formatearlo.
Cuando estás dividiendo una unidad de almacenamiento, realmente la estás preparando para los archivos que se almacenarán en ella. Para un sistema operativo, debes considerar una instalación limpia.
Desde allí, Windows te preguntará si deseas formatear tu nueva unidad. Solo los sistemas operativos más nuevos, como Windows 7 y 10, tienen esta opción, y los más antiguos requerirán que formatees tu disco duro manualmente.
El formateo puede llevar mucho más tiempo y ser un poco más complicado, por lo que es bueno tener una guía disponible para ayudarte en el proceso.
Consejo profesional: se recomienda que no elijas las opciones "Realizar un formateo rápido" o "Habilitar la compresión de archivos y carpetas". Si lo haces, puedes limitar los usos de tu nuevo dispositivo de almacenamiento.
También hay más opciones disponibles para particionar. Algunos incluyen seccionar una parte de la unidad y hacer espacio para otros tipos de archivos.
Antes de ejecutar el proceso anterior, debes tener una idea de cuánto espacio deseas y para qué tipos de archivos. Para cada fracción que crees, debes formatearla antes de que pueda usarse.
Si planeas reemplazar un disco duro y restaurar tu PC a la configuración de fábrica, entonces deberás formatear el disco duro que particionaste mientras accedes al método de instalación del sistema operativo.
Por otra parte, deberás reiniciar tu computador, después de lo cual puedes insertar las unidades de almacenamiento para reinstalar el sistema operativo.
Para eliminar tus particiones, simplemente navega hasta "Opciones de unidad (avanzadas)" y elige la opción "Eliminar".
Recuerda que puedes crearlas o eliminarlas en cualquier momento. Solo ten en cuenta que puedes perder archivos si no realizas una copia de seguridad en otra ubicación. Verifica dos veces para asegurarte de que tus archivos están guardados en otro lugar antes de eliminarlos.