En los últimos años, quizá más del 2017 en adelante, la producción de elementos culturales dio un giro y retomó algunos conceptos de la década de los ochentas y noventas.
Si bien explotar la nostalgia era algo que venía sucediendo desde el surgimiento de la moda hipster, la entrada de la generación Z como foco de consumo trajo una nueva visión a lo que se considera vintage y de moda.
La orientación temática de una buena parte de los contenidos creados en la actualidad busca, por lo tanto, satisfacer a ese sector en transición Millenial y Z. Sin mencionar que son aquellos nacidos en los noventas y ochentas quienes ahora generan contenido inspirado en dichas décadas.
Esta tendencia no solo afecta a la música o a la forma de vestir, sino a muchos otros productos culturales, incluyendo los videojuegos. En este rubro ha habido un resurgimiento de algunas características del pasado como lo son las estéticas de 8 bits y 16 bits, y géneros de videojuegos como...